Juegos vibrantes
Otro día leí que la mamá de Iván comentaba cómo a su hijo le gustaba que le cepillaran los dientes con un cepillo eléctrico.
A Salvi últimamente el cepillado no le estaba gustando, se molestaba, gritaba, no le agradaba demasiado el contacto del cepillo común (de esos que se ponen en el dedo) con su boca. La limpieza de los dientes no estaba siendo sencilla.
Así que probé el cepillo eléctrico. Le puse sobre el cabezal el cepillito de silicona para que fuera más suave.
Y entonces:
(Filmación gentileza de Agustín)
Empecé entonces a revolver los viejos juguetes, esos que a veces le han regalado a Salvi y han quedado traspapelados, porque en su momento no le interesaron. Encontré la abeja del video que sigue, que vibra al tirarle de una cuerda, aunque lo debe accionar uno, porque el mecanismo es duro. Y la otra es una ballena que ya está fijada en su centro de actividades, ya que esta es facil de hacer vibrar estirándole una parte, pero con facilidad.
Ahora yo me pregunto:
si es verdad que la comida ideal debería parecerse a esas cosas que nuestros hijos eligen para jugar, esas que se llevan espontáneamente a la boca, esas que disfrutan mientras las saborean......qué debería hacer yo? Buscar comida que...
...¿¿VIBRE?????!!!!!
jejejejeje... me encantó el video de la cepillada... también el otro.. se ve que goza mucho tu enano..:)
ResponderEliminarLo de la comida?? hummm.. algo que vibre?? no lo sé...es algo difícil con los gustitos de Salvi, no?? :)
Un beso para tus peques..